Revisión sistemática sobre las consecuencias que tiene en el desarrollo infantil la existencia de un trastorno depresivo en las madres
Date
2021-11-04Author
González Navarrete, Arlette
Manriques Maldonado, Sophia
Peña Soto, Constanza
Publisher
Universidad Católica de la Santísima ConcepciónDescription
Seminario de Investigación para optar al grado académico de Licenciado en Trabajo SocialMetadata
Show full item recordAbstract
La salud mental como lo indica la Organización Mundial de la Salud (2018), se define como un estado de equilibrio y pleno bienestar físico, mental y social, que conforma una parte integral de la salud de cada persona, y no solo la ausencia de enfermedades. En ese contexto, la salud mental es un aspecto importante en cualquier etapa del desarrollo humano, que abarca la infancia, adolescencia, adultez y vejez. Esta afecta directamente el funcionamiento de las personas y de la sociedad, ya que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (2018) “la salud mental y el bienestar son fundamentales para nuestra capacidad colectiva e individual de pensar, manifestar sentimientos, interactuar con los demás, ganar el sustento y disfrutar de la vida” (párr..3). De esta manera, la salud mental no es un elemento ajeno a la realidad de las personas, sino que, más bien, es una parte esencial, puesto que puede incidir positiva y/o negativamente en el desarrollo de estas. Ahora bien, en Chile la salud mental es una de las áreas de la salud pública más postergada a través de los años, debido a que, principalmente los aportes financieros que entrega el Estado corresponden a cifras por debajo de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud; como lo afirma Salinas (2019) “se entrega un 2,4% a esta arista desde el presupuesto de salud” (párr..17), de un promedio total de 8% aportado por países asociados a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), donde se encuentra Alemania, Estados Unidos, Francia, España, entre otros. Junto a lo anterior, se argumenta que si bien Chile cuenta con un Plan Nacional de Salud Mental, aún no existe una ley vigente de salud mental, además, las políticas y planes de salud mental se encuentran desactualizadas al contexto actual; por lo que, en este sentido el Ministerio de Salud (2017) afirma que los planes y programas respecto a esta materia, se deben actualizar y articular en base a políticas públicas, que sean universales, coherentes y de calidad, siendo pertinente profundizar en el modelo comunitario de salud mental. Esto, revela que es necesario un plan destinado a prevenir, atender y responder colectivamente a las necesidades de la población Chilena, y una mejora en el abordaje psicosocial en materia de salud mental.